Palabras que pronuncié en honor de Tomás Roncero con motivo de su homenaje por Peña REMATE en el Palacio Riyad de Tetuán el 22 de marzo 2018.
¿Qué es madridismo?
¿Y tú me lo pregustas?
Tomás,
Madridismo eres tú, diría
Gustavo Adolfo Bécquer.
El privilegio de ser madridista es un don
sobrenatural basado en las glorias más intrépidas del club más señero del
mundo.
En blanco y negro o en color, el madridismo brilla
por donde quiera que ondeen sus arrasadoras consecuciones. Un club cuyo escudo
no deja de iluminar al sol en ninguno de los puntos cardinales del globo, por
lo que se puede decir que el poderío presencial del Real Madrid acompaña la
esencia de la vida misma, induciendo a los seguidores y aficionados a
vanagloriarnos de ser algo vikingos, algo merengues, pero siempre blancos pese a las repentinas adversidades que el rigor
del destino suele obsequiar el camino de la realeza deportiva.
El 6 de marzo de 1902, hace exactamente 42.385 días,
nacía el Madrid Foot Ball Club para la gloria del deporte, ese club iba a ser
el orgullo de una ciudad mágica, un símbolo a imitar por todos los rincones del
universo. Se bautizaba a nuestro actual Real Madrid, para lucimiento de los
trances y cambios históricos en el destino del país vecino. Toda una vida
marcada por pocas desdichas y por las más altivas y elocuentes dichas.
En aquél día, nació el que iba a ser el mejor club
del siglo, el único con ese distintivo que
espero podamos conseguir
nuevamente dentro de 82 años aunque, a muchos de nosotros, no nos tocará
disfrutar de la celebración y del festejo… y es que nuestro Real Madrid nos
tiene muy mal acostumbrados, de tantos éxitos. La resaca de triunfos y trofeos
no desaparece de nuestro vivir hasta tal punto que, entre celebración y
celebración, celebramos otro logro de nuestro club amado. Y Tetuán no podía
estar sino en la atalaya, en la vanguardia de ese universal madridismo. Aquí nos
tienes, amigo Tomás Roncero, reunidos como bonachones feligreses que bendecimos
las gestas de nuestro Club, en espera de otras consecuciones propias del
pedestal que el destino construyó para lucirse en él nuestro Real Madrid con su
peculiar majestuosidad. El Real Madrid nació para encaramar la diadema de la
realeza deportiva universal y anidar su vocación imperial en los longevos laureles
de la historia.
Madridistas que celebráis la presencia del amigo
Tomás Roncero, estamos reunidos en sublime ofrenda de amor y de aprecio a nuestro
Club y a sus Secciones, en reconocimiento a esas aves blancas guiadas por
Cristiano Ronaldo y sus secuaces, por un lado, y por el increíble Llul, por
otro. Es nuestra cita con la gloria de los de Concha Espina desde nuestra
Tetuán altanera, para rendir pleitesía al Club más galardonado de la historia
del fútbol universal y para celebrar el orgullo de ser lo que somos
“madridistas para siempre”.
También renovamos y estrechamos el abrazo que une a
nuestros dos pueblos desde tiempos lejanos, en éste reencuentro en el que nos
fusionamos, españoles y marroquíes, con el mejor hermano, amparados por el amor
al equipo que cubre el firmamento de gloria y de grandeza, siempre respetando
los valores éticos y morales sobre los que se basa nuestro Club.
Gran parte de culpa de nuestra locura por el
madridismo, señor Roncero, la tienen los medios de difusión peninsulares que
arribaron siempre a estas latitudes hasta nuestros días y, de manera muy
especial, el periódico as, después de su reaparición en su segunda
época, y ese suplemento semanal del mismo que nos afanábamos en conseguir, llamado
as color, ambos en papel.
Dos publicaciones de las que mamamos el madridismo y
de las que expandimos nuestro léxico expresional en el idioma cervantino por la riqueza de su contenido y la
profesionalidad de sus componentes.
Vaya, desde este púlpito, nuestro reconocimiento
hacia as y hacia la perseverancia y auto superación de los profesionales que,
desde hace algo más de 50 años, despiertan a toda España con lo más novedoso de
nuestro Real Madrid y del deporte español en general.
Gracias por honrarnos con su presencia, centurión
del madridismo, en este festejo nuestro que irradia pasión por nuestro secular
Club. Gracias, en nombre de todas y de todos los madridistas – también en
nombre de los posibles infiltrados que hoy nos honran con su presencia- por deleitarnos, una vez más, con su visita a
esta ciudad donde tiene, cada vez más, un aumento vertical de admiradores y seguidores tanto en el “Chiringuito” como a través de
las páginas de as.
No quiero terminar sin hacer alardes de todos los
componentes de nuestra Peña REMATE y de la gran labor sociocultural que
desempeña para acercar, cada vez un poco más, la amistad hispano marroquí.
Peña REMATE, homenajeando a Tomás Roncero, nos hace
disfrutar los valores esenciales e eludibles
del Real Madrid para seguir siendo madridistas, con el orgullo que esto
conlleva, por los siglos de los siglos.
Muchas gracias. Hala Madrid.
Tetuán, 22 de marzo 2018.
Ahmed Mgara
ahmedmgara@yahoo.es